Currículum

Estudia en el Colegio Apóstol Santiago de Vigo, donde fundó en 1967 con dos compañeros del colegio, el trío Marco Balorento, grupo con el que consigue su primer galardón. De 1969 a 1974 forma parte del mítico grupo Voces Ceibes, un movimiento del nacionalismo cultural de entonces, surgidos alrededor de la trilogía "unha terra, un pobo, unha fala". Desde entonces y hasta su muerte, traza una carrera en solitario como cantautor que le lleva a publicar más de una docena de discos y cerca de doscientas canciones, bien musicando versos de diferentes poetas de nuestra cultura, bien recogiendo y adaptando canciones de carácter popular o incluso componiendo algunos temas de letra propia.

Artista polifacético muy relacionado con los ambientes musicales, literarios y artísticos del país, Suso Vaamonde destacó por su compromiso con el idioma gallego y con las clases populares del país. De entre todas sus amistades, la más destacada fue la que mantuvo con Celso Emilio Ferreiro, a quién le dedicó gran parte de su producción, incluso un disco entero con portada ilustrada por Laxeiro. Era asiduo de todas las fiestas populares gallegas y acudía a todas las convocatorias antifranquistas de la época, la mayoría de las veces de forma totalmente desinteresada.

De convicciones nacionalistas y de izquierdas, era demasiado romántico, idealista y utópico como para aceptar las directrices de ninguna sigla política partidaria. Quizás por eso vivió en sus carnes la represión política del exilio sin que ninguna organización política hiciera gran cosa por cambiar la situación. El 3 de junio de 1979, en un recital antinuclear celebrado en la 'Praza da Ferrería' de Pontevedra, Vaamonde fue denunciado por cantar la famosa estrofa "Cando me falan de España...". El 21 de noviembre de 1980 fue procesado y condenado a seis años y un día de prisión por un delito de "injurias a la Patria con publicidad". Delante de tamaña condena, decidió tomar el camino del exilio a Caracas. Suso Vaamonde se convertiría así en el primer exiliado de la democracia española. Tras cuatro años lejos de los suyos, ingresó en la prisión de Ourense para conseguir, después de 46 días entre rejas, el indulto del gobierno socialista en 1984.

En su labor como músico, conviene destacar que gracias a sus canciones muchos poetas hicieron populares sus versos. Puso música a textos de Castelao, Curros Enríquez, Celso Emilio Ferreiro, Alfredo Brañas, Xosé Lois Méndez Ferrín, Uxío Novoneyra, Bernardino Graña, Xosé Neira Vilas, Manuel María, Ramón Cabanillas, Fermín Bouza Brey, Roberto Blanco Torres, Manuel Rodríguez López, Aquilino Iglesias Alvariño, Valentín Lamas Carvajal, etc... Muchos de ellos recorrieron los escenarios de España, Portugal, Francia, Suíza, Alemania, Inglaterra, Argentina o Venezuela a través de la voz del cantor de Regodobargo.